jueves, 22 de julio de 2010

CAMBIO DE TIEMPO Y ESPACIO: EFECTO DE LA NATURALEZA SILVESTRE





Recibí hace tiempo del señor Rodrigo Caballero González, de Aguayo, Xoxo, estado mexicano de Oaxaca, un trabajo excepcional que, intitulado "La Transposición del Tiempo y el Espacio a Cero Absoluto, Patrimonio Cultural de la Humanidad" revela un efecto de la naturaleza digno de exponerse.

Se trata del cambio de espacio y tiempo que produce la naturaleza silvestre básicamente en el ser humano obviamente con características o facultades "más que físicas, intelectuales" (sic); o sea con un psiquismo más desarrollado.

El suscrito me comenta sus investigaciones y conocimientos referentes a alteraciones del tiempo y el espacio, como traspolación de seres y regresos de éstos a su lugar de origen con especiales dones.

Herencia nómada cuicateca
"Para explicar racionalmente los fenómenos de la transposición del tiempo y del espacio -dicta Caballero- es necesario tomar en cuenta la existencia de poderosísimos campos magnéticos y telepáticos de esplendor y ensueño sobrenatural, que ocurren en determinados momentos en la naturaleza silvestre. Éstos corresponden a los fenómenos de la creación y coinciden con la presencia humana en ciertos puntos de la Tierra. Mas para que tengan lugar, se requiere que el individuo posea determinadas condiciones o características más espirituales que físicas e intelectuales.

"Este conocimiento corresponde a la herencia nómada de la cultura cuicateca de Oaxaca, versión de la lengua de San Juan Teponaztla, municipio de Tepeuxila, Cuicatlán, Oaxaca .Sus efectos se desarrollan en sus bosques y selvas de Tierra Verde; como pudieran ocurrir en otra parte del orbe.

"El fenómeno en sí consiste en salirse los individuos transitoriamente de nuestro espacio y tiempo dimensional, para vivir una aventura sobrenatural en cualquiera de sus formas y en otro lugar que no sea de este mundo. Normalmente suceden impulsados por una fuerza oculta y sin que la persona se dé cuenta de cómo piensan, ni cómo terminan."

Moisés y Jesucristo: mutantes
"Los fenómenos sobrenaturales son muy bastos y prodigiosos; no tienen por tanto, una explicación racional. Ocurren inclusive casos en que las personas transpositadas se vuelven inmortales y eternas por pasar a una dimensión donde la vida es eterna. Aquéllos que poseen en su ser las altas fuerzas espirituales y conocen desde niños los secretos maravillosos de estos fenómenos, se llaman mutantes. A esta estirpe pertenecen Moisés y Jesucristo de la cultura hebrea antigua; Quetzalcóatl y muchos otros de las culturas mesoamericanas de los tiempos prehispánicos.

"A estas fuerzas latentes y bullentes del universo sobrenatural pertenece el amor, como fenómeno hipnótico de la reproducción de las especies; y la clarividencia como un don congénito de los individuos que se desarrollan desde la cuna".

Magnetismo diferente al oxígeno
De esta manera, en concreto la teoría de la Transposición... se basa en que la floresta es una parte sagrada de la creación.

Esto implica que cada árbol, cada planta, cada hoja y cada flor emiten poderosa energía magnética y telepática diferente al oxígeno, el cual da vida y sustento a los entes espirituales que habitan el lugar.

Y cuando un ser humano se introduce en las selvas e impenetrables bosques, se impregna y empapa de esa energía para volverse vulnerable al ensueño sobrenatural, que no es otra cosa que una forma de intoxicación emocional de nuestro cerebro y nuestro ser esencial como entes sagrados de la creación.

Esta fuerza sobrenatural de ensueño es magnética y telepática, porque en la práctica de la clarividencia los niños pueden comunicarse con los animales silvestres, con las plantas, con las flores y hasta con las piedras del camino. Tal concepto nos lleva a determinar que nuestra energía congénita y sobrenatural es de comunicación magnética y regida por Dios, el gran espíritu creador.

La enfermedad del amor
Más adelante define al amor como “Una forma de intoxicación emocional mutua entre un hombre y una mujer”. Asimismo como “Una fuerza magnética y telepática”.

Y añade que en lo que toca a la cultura cuicateca antigua, objetivo de sus investigaciones por ser Rodrigo Caballero descendiente de ésta, sus ancestros conocieron al amor como el mal o una enfermedad, "y curaban a las niñas adolescentes con azotes de chichicastle".

Un fenómeno eterno
De lo anterior, Caballero González infiere que la lengua cuicateca de Oaxca posee profundo conocimiento de los diversos fenómenos sobrenaturales, donde cada pueblo y cada rancho guarda sus propios recuerdos de lo acontecido a través de los tiempos. "Y siguen ocurriendo cuando estamos trasponiendo del siglo XX al XXI", concluyó en su misiva suscribiendo domicilio en su comunidad de Aguayo, Xoxo, Oaxaca para entablar comunicación con él.




Y así fue. Más adelante habría de visitarme en México y ser entrevistado en aquel serial de "Operación Contacto Internacional" que trasmití por Radio 620 de AM. En él sostuvo al aire cuanto me delató por escrito, con la mayor naturalidad y seriedad.
Luis Ramírez Reyes

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